
Las fotos de mi primera comunión son un recuerdo personal y único, todo gracias a la pasión que mi padre tiene por la fotografía. El padre de Carla buscaba algo diferente, algo que no fuera lo de siempre, para ello buscó en la red y dio con mi web. Se puso en contacto conmigo vía email y dio la casualidad que me encontraba de viaje.
Pasados unos días respondí a su correo y le expliqué cómo realizo este tipo de books, para el caso de Carla tenía pensado dar un paseo por el parque de Enrique Tierno Galván en Madrid.
Quedamos por la mañana temprano un sábado de primavera, primero fui directamente al domicilio y allí comenzamos a conocernos un poco antes de pasar directamente a la sesión. José Luis me contó su gran afición a la fotografía y cómo hace años había disfrutado mucho fotografiando carreras en el Jarama. Cuando terminase la parte de los preparativos y Carla estuviera vestida de comunión nos iríamos al parque que por otra parte es un lugar muy aprovechable, me preguntó si no tendría inconveniente en dejarle grabar vídeo mientras yo fotografiaba a su hija, le dije que ninguno en absoluto.
En seguida congenié con Carla, es una chica muy abierta y sonriente, le prometí que lo pasaríamos bien durante la sesión y que cualquier idea que ella tuviera sobre las fotos la podía compartir conmigo y la haríamos a su gusto. La verdad es que todo salió a pedir de boca y días mas tarde cuando entregué el trabajo a José Luis me comento que todos habían quedado encantados.
Pasada alguna semana mas, me llamó y me sorprendió mucho la historia que me contó. Resulta que el pensó en su día que yo no le contestaba a su correo inicial porque estaría lleno de trabajo y no podría atenderle, y se apresuró a contratar otro fotógrafo con un estilo totalmente diferente al mío, hicieron una sesión en estudio. Cuando contacté con José Luis el ya había realizado la sesión de fotos de comunión con el otro fotógrafo (yo no conocía nada de esta situación), pero aún así lo habló con su mujer y decidió apostar por mi trabajo y lo que es mas, llamarme después en persona para contarme esta historia que me emocionó.
José Luis te estaré encantado por la tremenda amabilidad de tus palabras y por tu gesto.
